Llevo diez días un poco desconectada del blog, pero tiene una explicación. Vuelta a un sitio que llaman a ratos universidad y también, y eso me hace especial ilusión, terminé un artículo para mi primera colaboración con la revista de colección Danza Ballet. El artículo, que puedo avanzar trata del ballet soviético, se publicará en marzo, en el número tres de la revista.
Comparto un pequeño artículo que tenía guardado de hace mucho tiempo en el ordenador. Y linkeo a uno de los primeros artículos de este blog, sobre las representaciones del Bolshoi de este ballet en Londres.
– Ficha técnica
- Título: “Le Corsaire ´´
- Coreógrafo: Yuri Burlaka y Alexei Ratmansky
- Música: Adolphe Adam, Leo Delibes, Cesare Pugni, Pyotr von Oldenburg, Riccardo Drigo, Albert Zabel, Julius Gerber. editado por Alexander Troitsky
- Libreto: Jules Henri Vernoy de Saint-Georges y Joseph Mazilier, editado por Marius Petipa
- Decorados: Boris Kaminsky
- Vestuario: Yelena Zaytseva, sobre los originales de Evgeny Ponomaryov (1899)
- Luces: Damir Ismagilov
- Fecha y lugar de estreno: 21 de Junio de 2007, Teatro Bolshoi, Moscú
- Duración: 3h y media ( 2 intermedios)
-Sobre esta versión
Esta versión nace de un esfuerzo de reconstrucción coreográfica dentro del ballet del teatro Bolshoi, realizado por Yuri Burlaka y Alexei Ratmansky (entonces director de la compañía).
Anteriormente a esta versión, el Bolshoi había representado la reconstrucción de Konstantin Sergeyev (de 1973, estrenada en Moscú en 1992) o de Yuri Grigorovich (estrenada en 1994).
Al igual que con la reconstrucción de “La hija del faraón ´´ de Pierre Lacotte para la compañía en el año 2000, el objetivo era devolver a escena la mayor parte posible del estilo de Petipa (que presentó reconstrucciones de El Corsario en 1858, 1863, 1868, 1885 y 1899).
Para reconstruir la coreografía se usaron los documentos de la colección Sergeyev, que permanecen en la sección de teatro de la biblioteca de la Universidad de Harvard, que los adquirió en 1969.
Nicholas Sergeyev trabajaba en los Teatros Imperiales de San Petersburgo a principios del s.XX (1903-1917), lo cual explica la gran presencia de ballets de Marius Petipa y Lev Ivanov en su colección.
Todos los textos de la colección que han llegado a Occidente (pues Sergeyev abandona Rusia tras la revolución de 1917) aparecen en notación Stepanov. Vladimir Stepanov, crea su propio sistema de notación de la danza clásica, y comienza el impulso de protección del repertorio ruso que culmina en la colección Sergeyev. También aparece dentro de la colección el trabajo de Alexander Gorsky (célebre en la historia del ballet por su versión de “Don Quijote´´ para el Bolshoi, de dónde fue director) y de los dos ayudantes de Sergeyev, Alexander Chekrygin y Victor Rakhmanov.
Pero las notas de la colección no siempre contienen todos los detalles necesarios para la coreografía, y tras la muerte de Sergeyev, se tuvo que recurrir a expertos en la notación Stepanov para descifrarlas.
Burlaka y Ratmansky eligieron no utilizar la totalidad de la documentación sobre «Le Corsaire´´ de la colección, sino expander algunas escenas según las partituras encontradas en los archivos de la Ópera de París (pertenecientes a la reconstrucción de 1867 de Joseph Mazilier).
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-El vestuario.
Se estima que esta producción costó más de millón y medio de dólares. Tan sólo el personaje de Medora tiene unos 5 cambios de vestuario, 4 tutús y un traje de corsaria.
Los diseños tratan de imitar los originales de Evgeny Ponomaryov para la versión de Petipa , a su vez influenciados por las producciones parisinas de mediados del SXX (Al igual que muchas otras obras, «Le Corsaire´´ fue estrenado antes en Paris, pero encontró fama en Rusia).
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-Cambios en la estructura
Uno de los cambios más notables es la ausencia en esta versión del personaje de Alí, el esclavo de Conrad que toma parte en el principal paso a dos de esta obra en muchas versiones.
Originalmente, el rol de Conrad (creado para el italiano Domineco Segarelli) no era un rol danzado, al igual que el rol de Lankedem (que participa en el Pas des Esclaves en la versión del American Ballet Theater). En esta versión, el rol de Lankedem se mantiene de pantomima mientras que el rol de Conrad asume el peso dramático y las variaciones del esclavo.
La coreografía que conocemos en las otras versiones modernas para la variación masculina del Pas des Esclaves y para las del personaje de Alí, fue insertada por el georgiano Vakhtang Chabukiani durante los años 30.
En la version de Pyotr Gusev para el Maly en 1955 (que luego también será montada para el Mariinsky), el Grand Pas se realiza con tres personas, Conrad, Medora y Alí. El número de personas coincide con la reconstrucción de Samuil Andrianov para el Mariinsky en 1915, pero en esa versión no se ponía ningún peso dramático al segundo hombre, que servía simplemente de soporte a la bailarina.
El último acto del ballet presenta coreografía prácticamente desconocida en las versiones occidentales. Se incluye una gran escena llamada Grand Pas des Eventailles, en la que hay tiene un paso a dos para Medora (con un personaje no identificado) y un pas de six para el cuerpo de baile.
-El libreto.
Acto I
Escena 1
La acción comienza en la plaza del bazaar, con las esclavas a la venta esperando compradores entre la multitud de turcos, griegos y armenios (se nos sitúa en un lugar orientalizado, pero ninguna mención en especial a la localización). Una banda de corsarios aparece en la plaza, liderados por Conrad
Medora aparece en el balcón de la casa de Lankedem, su guardián. Al ver a Conrad, forma un selam (código de flores, popular en la Europa de los siglos XVIII y XIX) con las flores del balcón y se lo lanza. Conrad, al leer el selam se convence de que la bella Medora lo ama.
Lankedem y Medora aparecen en la plaza. Mientras Lankedem examina las esclavas, Medora y Conrad intercambian miradas.
Un rico Pasha aparece en la plaza junto a su séquito. Los mercaderes le rodean para enseñar sus esclavas, pero ninguna le agrada. Entonces el Pasha se fija en Medora y decide comprarla. Pero Lankedem se niega a vender a su custodia, y le ofrece otras doncellas.
Pero el Pasha insiste en comprar a Medora. Su oferta es tan atractiva que Lankedem no puede resistirla y acepta el negocio. El Pasha vuelve a su harem ordenando que Medora sea enviada inmediatamente. Conrad calma a Medora y le promete que los corsarios la secuestrarán.
A una señal de Conrad, los corsarios inician una danza alegre con las esclavas, en la que Medora participa de forma activa, para regocijo de los presentes. Pero de repente, da la señal de Conrad, y los corsarios se apropian de las esclavas y de Medora también. Bajo órdenes de Conrad, Lankedem también es secuestrado.
Escena 2
Los corsarios, con su botín y las doncellas cautivas regresan a su guarida. Medora, entristecida por la suerte de sus compañeras de esclavitud, pide a Conrad liberarlos y él acepta. Birbanto y los otros piratas protestan, diciendo que ellos también tienen derecho a las mujeres. Se amotinan y pelean con Conrad, pero este sale vencedor del tumulto y se marcha con Medora a su tienda.
Aprovechando la confusión general, Lankedem decide intentar escaparse pero, es visto por Birbanto y los otros piratas que se burlan de él y, tras robarle todo su dinero, deciden participar en un complot para devolver a Medora al Pasha. Birbanto elige una flor y la rocía con una poción para dormir, se la pasa a Isaac y le dice que se la dé a Conrad.
Conrad aparece y ordena servir la cena. Mientras que los corsarios comen, Medora baila para Conrad y éste le jura amor eterno.Poco a poco, los corsarios se dispersan, a excepción de Birbanto y varios de sus secuaces que vigilan a Conrad y Medora. Lankedem aparece con una joven esclava; señalando a Medora, le dice a la esclava que le de la flor. Medora entrega la floor a Conrad, y añade que las flores explican todo su amor por él. Conrad, se lleva con amor la flor a sus labios, pero el olor embriagador le va a la cabeza y, a pesar de sus increíbles esfuerzos para no sucumbir al efecto, inmediatamente cae en un sueño profundo.
Birbanto hace una seña a los conspiradores para poner su plan en acción. Medora es rodeada por los corsarios que la amenazan. Tratando de defenderse, apuñala a Birbanto en el brazo e intenta huir, pero se desmaya y cae en los brazos de sus secuestradores.
Birbanto despide a sus secuaces, Justo cuando está a punto de terminar con Conrad éste se despierta. Al enterarse de que Medora ha sido secuestrado, Conrad y los corsarios salen a perseguirlos.
Acto II
Escena 3
En el palacio del Pasha. Las odaliscas están aburridas y empiezan a jugar. Zulma exige que las odaliscas le muestren respeto, pero Gulnara y sus amigas se burlan de la altiva sultana.
Llega el Pasha. Las odaliscas están obligadas a inclinarse ante su señor, pero la rebelde Gulnara también se burla de él. El Pasha, llevado por su juventud y belleza, lanza su pañuelo, Gulnara lo lanza a sus amigas, finalmente, el pañuelo, que pasa de mano en mano, llega a una vieja negra que, recogiéndolo comienza a perseguir al Pasha que tiene problemas para contener su ira.
En un intento por complacer al Pasha, el Guardián del harén adelanta tres odaliscas.Zulma trata de atraer la atención del Pasha que, en ese momento, es advertido de la llegada del comerciante de esclavos.Al ver a Lankedem, que lleva a Medora, el Pasha se llena de alegría. Medora le pide concederle su libertad, pero al ver que es implacable, se queja del trato cruel por su tutor. Asi que el Pasha ordena al eunuco que se lleve al judío. Gulnara es amable con Medora y simpatiza con su suerte. El Pasha ofrece distintas joyas a Medora pero, para disgusto del Pasha y alegría de Gulnara, ella las rechaza de plano.
Aparece el líder de un grupo de derviches y solicita alojamiento para la noche. El Pasha a permiso a los derviches para en su jardín. Divertido por la vergüenza de los derviches ante las seductoras esclavas, el Pasha promete darles a conocer todos los encantos que su harén tiene que ofrecer y ordena que las esclavas empiecen a bailar. Entre las bellas bailarinas, Conrad reconoce a su amada.
Al final de la celebración, el Pasha ordena que Medora vaya a sus habitaciones privadas en el palacio.
Quitándose el disfraz, los corsarios amenazan al Pasha con sus puñales, y Conrad y Medora se abrazan.
Los corsarios estan concentrados en su saqueo del palacio. Gulnara viene corriendo perseguida por Birbanto, ella se acerca a Medora y ruega ayuda. Conrad se pone de su parte, mientras Medora reconoce a Birbanto como su secuestrador y le cuenta a Conrad su traición. Riendo, Birbanto niega la acusación, pero, para confirmar sus palabras, Medora señala a Conrad la herida que le infligió a Birbanto su puñalada en el brazo. Conrad está a punto de disparar contra el traidor, pero Medora y Gulnare le detienen y Birbanto sale corriendo gritando amenazas.
Medora, mareada por la debilidad y la tensión, está a punto de desmayarse, pero, con la ayuda de Gulnara y Conrad, recupera la conciencia pero de repente, los guardias del Pasha irrumpen en la sala. Los corsarios son vencidos, Conrad es desarmado y condenado a muerte.
Acto III
Escena 4
En las habitaciones privadas del palacio el Pasha da órdenes de que comienzen los preparativos para su boda con Medora. Esta lo rechaza con indignación. Conrad en cadenas es conducido a su ejecución. Medora, ante la terrible situación de su ser querido, pide misericordia al Pasha. Él promete el perdón de Conrad a condición de que Medora, de su propia voluntad, se comprometa a ser suya. Medora no sabe qué hacer y, desesperada, acepta los términos del Pasha.
Cuando se quedan solas, Conrad se acerca a Medora para sabes las condiciones del Pasha para ponerlo en libertad. Conrad rechaza la condición y deciden morir juntos. Gulnara, que ha estado observandoles sugiere un plan, los amantes aceptan y le dan las gracias.
El Pasha vuelve y Medora le informa que acepta sus términos. Feliz el Pasha da órdenes de que Conrad sea liberado de toda forma de persecución y de que los preparativos se pongan en marcha para la ceremonia de la boda.
Al comienzo del cortejo nupcial, la novia está cubierta por un velo. Al final de la ceremonia, el Pasha lleva a la novia del brazo, y le pone un anillo en el dedo. Las danzas de las odaliscas termina la ceremonia.
A solas con el Pasha, Medora intenta seducirlo con sus bailes, pero es bastante obvio que ella no puede esperar la hora de su huida. Al ver la pistola en su cinturón, ella dice que le asusta y le pide que lo quite. El Pasha hace lo que le pide y pone la pistola en manos de Medora. Su miedo aumenta al ver también metida una daga en el cinturón. Para calmarla de una vez por todas, el Pasha saca el puñal y se lo. A continuación, trata de abrazarla, pero esta se desliza ágilmente de sus brazos. El Pasha cae a sus pies y, implorando su amor, le da su pañuelo. Como si de una broma se tratará, ella le amarra las manos y él, divertido, se ríe de su broma.
A medianoche, Conrad aparece. Medora le entraga la daga y amenaza al Pasha con dispararle si abre la boca para pedir ayuda. La pareja escapa rápidamente
El Pasha intenta liberarse. Gulnare viene corriendo y, fingiendo horror, desata sus manos. El pasha convoca a su guardia y ordena perseguir a los fugitivos. Tres disparos de los cañones traen la noticia de que los corsarios han zarpado. El Pasha tiene un violento ataque de ira: su amada esposa ha sido secuestrada. «Yo soy tu esposa», dice Gulnara, y, señalando con el dedo de la boda, agrega, «Este es tu anillo!»
El Pasha se queda en estado de shock.
Escena 5
Tormenta y naufragio
En el mar. Una noche clara y tranquila en la cubierta. Los corsarios están celebrando su liberación. Sólo el desventurado Birbanto, en las cadenas, no participa en el festival y la algarabía. Teniendo piedad de él, Medora pide Conrad que perdone a Birbanto. Después de algunas dudas Conrad indulta a Birbanto que solicita permiso para agredecerselo a sus compañeros piratas con un barril de vino.
Hay un rápido cambio en el clima y se levanta una tormenta; aprovechando la confusión, Birbanto de nuevo empieza a crear problemas con los piratas, pero Conrad lo arroja por la borda. La tormenta empeora: hay truenos, relámpagos y un mar muy violento. Se oye el ruido de una grieta y el buque encalla en una roca.
El viento poco a poco se apaga y el mar vuelve a la calma. La luna sale y dos figuras se iluminan con su luz plateada: se trata de Medora y Conrad que, milagrosamente, no se han ahogado. Llegan a la roca, trepan sobre ella y dan gracias a Dios por su salvación.
Es una maravilla tu blog, Silvia, la cantidad de detalles e información interesante que incluyes. ¿Continuarás con él?
Un abrazo.